Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2012
EL OSITO DEL DESVÁN    Aquel   osito olvidado en el cajón, con su oreja descosida, la sonrisa tímida y un corazón en vez de nariz, soñaba cada noche con la niña. Ella vendría algún día al trastero, estaba seguro de ello.   Nunca pudo dormir sin él. Cada noche, después del beso a su madre, la pequeña lo abrazaba fuerte, segura con su tacto de peluche, tranquila con la sonrisa que le brindaba si lo miraba a la cara. ¡Cuántas pesadillas habían ahuyentado juntos!. El osito la conocía muy bien. Sí, es verdad que había crecido, que ya no era la pequeñaja que lo lanzaba con desgana cuando despertaba, que ya no usaba su chupete desde hacía años, que ya no necesitaba para dormir la música de aquella caja con la bailarina girando y girando, que hacía años ya que sus noches no necesitaban una lamparita encendida, que ya no llamaba a los papás porque quería agua de madrugada….. Pero seguía siendo su niña. Ahora ella no jugaba con muñecas, esa niña se hizo mayor. Oyó decir qu